Mónica Vergara: después de 1,670 días llegó el reconocimiento

Ivan Pérez/ @elmisterperez

En la Ciudad de México, en el oriente, está el deportivo Santa Cruz Meyehualco. En invierno las canchas generalmente son de tierra y en verano algunas tienen pasto. Pero el futbol nunca para.

Si vives en Monterrey, Guadalajara, León, Tampico, Puebla, Tlaxcala, en cualquier sitio, sabes que hay lugares bravos para jugar. Una entrada puede ser motivo de una gresca monumental, los árbitros la pasan mal, hay barridas brutales, te raspas las piernas, te haces hoyos en las rodillas. Tienes que amar el futbol para estar ahí. Tragas tierra, quedas hecho un soldado de barro. Así se juega en Santa Cruz.

Y si eres mujer, la cosa no cambia. Es peor. “Algunos papás, a esa edad me decían que me fuera a lavar los trastes, que el futbol no era para niñas”.

Mónica Vergara jugaba en la escuelita de la Tota Carbajal. La entrenadora de la Selección Femenil Sub-17 empezó en el barrio, donde el futbol es un tema de honor.

Ahora dirige al equipo que buscará esta semana llegar a la prim…