🎴 Tarjetas coleccionables: ¿cómo adaptarse al presente?
Topps muestra el camino para hacer relevante una tarjeta coleccionable. El mercado ha cambiado y hablamos de un negocio de miles de millones de dólares, e incluso se han creado medios especializados.
¿Cómo mantener viva una industria que tiene más de 150 años? Si bien la respuesta no es sencilla, la podríamos resumir en una sola palabra: adaptación.
El negocio de las tarjetas deportivas coleccionables está desde hace dos siglos.
Desde su origen, en la década de 1860, estas pequeñas piezas de cartón ilustradas han evolucionado enormemente, adaptándose a los cambios en la industria del deporte y las preferencias de los coleccionistas.
Han resistido el paso del tiempo y son una parte integral de la cultura deportiva. Incluso a lo largo de todos estos años, han pasado de ser simples objetos de colección a activos de inversión altamente valorados.
La explosión de popularidad en las últimas décadas ha llevado a un resurgimiento en la producción y comercialización de estas tarjetas.
El mercado de tarjetas deportivas tiene un valor que supera los 1,300 millones de dólares en la actualidad de acuerdo a las cifras de Business Research Insights y se espera que para los siguientes 10 años este número se cuadruplique.
¿Cómo y qué ha hecho la industria de las tarjetas coleccionables para sobrevivir?
Topps y sus nuevos parches
La industria busca consolidar una nueva oferta, dar un plus a sus productos y Topps ahora está lanzando cartas que incluyen un parche auténtico que los jugadores portan durante los juegos.
Desde la temporada 2023 en la MLB, junto con Topps, lanzaron una nueva dinámica para los jugadores novatos que hagan su estreno en las Grandes Ligas
¿Qué es Topps?
Es una empresa estadounidense que fabrica tarjetas y otros objetos de colección. Se fundó en 1938.
A cada pelotero que debutaba se le colocaba un parche en la manga de la camisola que portaría durante toda sus intervenciones en el partido.
Este parche no solo serviría para convertirse en un símbolo de logro para cada jugador, también funcionaría para crear las cartas de novato, ya que al final del juego la MLB le quita este distintivo al jugador para posteriormente entregárselo a Topps y fabricar estas nuevas tarjetas.
Lo que hace interesante -y caro a su vez- a estos parches es que dicha tarjeta será única, solo habrá una de su tipo a comparación de otras ediciones donde suelen salir más de una copia dependiendo lo especial de la carta.
El parche comenzó a utilizarse desde el Opening Day de la temporada pasada y lleva escrito "MLB Debut" y cuenta con el logotipo de las Grandes Ligas.
Aunque no todas estas tarjetas ya se encuentran en circulación, la marca lanzó 91 en 2023, de las cuales hay algunas que ya se han vendido en más de 10,000 dólares.
Hay casos como la carta de Anthony Volpe, uno de los talentos con más reflectores de los últimos años. Su card no ha saludo y ya hay candidatos para su compra que ponen sobre la mesa hasta 150,000 dólares.
La propuesta está revolucionando el mercado y haciendo que los coleccionistas estén más que dispuestos a pagar cifras gigantescas por alguna de estas tarjetas.
Para la presente temporada, Topps y la MLB decidieron agregar a esta dinámica también a los peloteros que se estrenen con algún equipo de la liga, sin importar si anteriormente habían debutado en alguna otra liga de gran relevancia como por ejemplo la de Japón.
El éxito mediático que ha tenido esta nueva activación, ha motivado que competiciones como la MLS se vean interesadas, por lo que previo al inicio de la presente temporada anunciaron que también lanzarían sus propios parches aprovechando el acuerdo de colaboración que tiene con Topps desde 2013.
Si bien el tiempo no cuadró para que un futbolista como Messi pudiera portar su propio parche y tasar su tarjeta en bastantes miles de dólares, el proyecto sí permitió que jugadores como Luis Suárez, Hugo Lloris o Emil Forsberg se unieran a la nueva dinámica.
Las tarjetas Topps MLS se incluirán en los productos de la marca a finales de año. Más adelante se anunciarán más detalles y quienes hayan debutado antes del 1° de abril tendrán su carta para esta misma entrega, pero si un jugador debutó después, su parche irá en la línea de productos del año siguiente.
¿Por qué una carta llega a valer tanto?
El valor de una carta puede variar enormemente, y si bien hay casos donde alguna puede llegar a cotizarse en varios millones de dólares, la realidad es que hay algunas por las que no se pagarían ni diez.
Estas tarjetas menos valiosas suelen ser aquellas producidas en grandes cantidades, con características comunes y de jugadores menos conocidos o menos relevantes en la historia del deporte.
Según un análisis escrito por Benjamin Christmann para el Journal of Economics de la Universidad de Michigan, hay al menos tres categorías que se consideran más valiosas en este mercado:
Cartas de novatos, la primera que un jugador tiene como profesional
Carta de autógrafo, con una firma física de un jugador
Cartas de recuerdo, una tarjeta con un pedazo de camiseta, bat, guante, gorra, calceta, etc
Es aquí donde hace sentido una propuesta como la del parche de debut, que incluye la exclusividad de cada una de este tipo de tarjetas y sobre todo porque la demanda se dispara cuando un artículo es único en el mundo, o incluso cuando es uno de cien.
También es claro que el valor de una carta puede ser bastante subjetivo y estar influenciado por una variedad de factores, como los gustos personales de los coleccionistas, las tendencias del mercado y la disponibilidad de información sobre la carta
Los coleccionistas o entusiastas de las cartas se ven motivados por la experiencia de inversión que pueden sentir al adquirir una carta valiosa, así como el apego emocional que pueden desarrollar al contar con una tarjeta autografiada por alguno de sus jugadores.
Claro que esta industria no está exenta de riesgos. Así como hoy mismo una carta de algún deportista puede llegarse a vender por miles de dólares, con lo volátil que pueden ser las nuevas audiencias, el interés puede decaer en cuestión de meses.
Pero, ¿qué dicen los números y cómo se posiciona el mercado de las tarjetas deportivas de cara al futuro?
Un mercado con mucho futuro
El mercado de las tarjetas coleccionables deportivas está experimentando un crecimiento significativo y se proyecta que supere la cifra de 4,100 millones de dólares para el año 2031, con una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) del 13.3%.
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